Todo, Todo/Everything, Everything (2017)

Esta película juvenil me pareció que está bien hecha. No me gusta lo que se está produciendo últimamente con respecto a este subgénero. Los actores interpretaron sus personajes de manera sencilla y natural. Diálogos fluidos y desenredados. Me gustó la paleta de colores y detalles de los escenarios en los cuales se desenvolvieron los personajes. Fácil seguir disfrutándola hasta el final.

Ahora en cuarentena, todos somos Maddie, quien toda su vida ha tenido que vivir encerrada y siguiendo la misma rutina todos los días. Ella desea ser libre y disfrutar de las cosas sencillas de este mundo, sentirse viva, ser una joven normal como todos los demás. En general sus ambiciones son alcanzables para todos menos para ella. Ahora que estamos encerrados y queremos tener nuestra vida de regreso podemos reflexionar acerca de lo afortunado que somos al poder disfrutar de la belleza de la naturaleza, poder conocer nuevas personas y hacer uso de todos nuestros sentidos.

Aprender a ser felices es una enseñanza que todos merecemos. Nos complicamos tanto buscando lo más rebuscado cuando la solución a nuestros problemas puede estar en solo apreciar la puesta del sol o escaparse al mar.

El co-protagonista nos enseña a luchar por lo que queremos con determinación y que cuando de verdad se ama no hay enfermedad, obstáculo, barrera, persona o cualquier cosa que pueda impedirte apoyar a esa persona, estar allí aunque sea un momento difícil, pero eso lo logra el amor. Cualquiera otra persona que hubiera conocido a Maddie y no hubiera visto lo especial que es seguramente habría salido huyendo de su vida.

Puntuación personal: 8/10.

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